Manualidad cristiana para niños: Testimonio de Juan el Bautista.
Mateo 3:11-12; Marcos 1:7-8; Lucas 3:15-17; Juan 1:19-28.
Hola herman@:
La manualidad de hoy es muy original. Es una sandalia como esas que utilizaban en el tiempo de Jesús. Lo mejor que tiene es que está elaborada con cartulina así que no es nada difícil todo lo contrario. En ella puedes copiar un versículo bíblico si lo deseas para que los niños recuerden que la humildad con que Juan vivía y predicaba es la que debemos tener todos los hijos de Dios.
Conversando con los maestros de la escuela dominical sobre compartir
Algo que nos gusta mucho a los niños en la Escuela
Dominical es regalar el producto de nuestro trabajo, si, así como se los digo.
La manualidad no siempre es para llevar a casa, muchas veces las hemos
regalamos en la congregación y no hay que esperar a una fecha señalada como el
día de las madres, o de los padres, o de los abuelos, o de los pastores sino
que las obsequiamos en cualquier momento en que nos pongamos de acuerdo los
alumnos con el maestro y siempre que las condiciones lo permitan. Los
niños escogemos con quien compartir y esto nos mantiene motivados.
La escuela deja de ser un aula y sale fuera de sus
paredes propiciando que interactuemos con nuestros hermanos, o con los que
vienen por primera vez a la Iglesia y por los cuales sentimos una empatía que
nos anima a poner nuestros dones a su servicio para que se sientan parte de la
gran familia que somos.
La clase no debe estar ajena a lo que ocurre a nuestro
alrededor. Salir de nuestro salón nos permite entrelazar lo que aprendemos con
un contexto real y vivencial. Estas acciones que a veces se piensan pequeñas
logran cambios en nosotros los niños porque nos hace protagonistas de un
servicio solidario, nos educa en generosidad, crea valores, aprendemos a
compartir lo que hacemos y tenemos, dejamos de pensar en nosotros mismos, crea
compromiso social, una convivencia positiva, nos ejercitamos en un mundo
inclusivo, ayuda a construir relaciones positivas con los miembros de la
congregación, conectamos esta experiencia con lo que aprendemos de la Palabra
de Dios, le da sentido a lo que conocemos de Jesús quien dedicó su vida a los
demás.
La escuela debe servir para ayudar a aumentar el reino
de Dios, ayudar a que todos sean felices, que nos sintamos miembros del cuerpo
de Cristo, con responsabilidades con nosotros mismos y con los demás y nos
ayude a tener una activa participación en la comunidad de fe.
👉🏼 RESPÓNDEME: ¿Han tenido este tipo de experiencias en
tu comunidad de fe? ¿Qué opinan tus discípulos de ellas? Por favor ve al Final
de la Entrada 👇👇y házmelo saber. ESCRÍBEME un COMENTARIO que eso no te demorará
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Estudio Bíblico: Testimonio de Juan el Bautista
¿A quiénes enviaron los judíos para preguntarle a Juan quién era?
Enviaron
a sacerdotes y levitas. Es comprensible esto porque el padre de Juan el Bautista era el sacerdote Zacarías (Lucas 1:5). Por lo tanto Juan era descendiente de Aarón así que por herencia era él también sacerdote pero no se comportaba como estaban ellos acostumbrados. Los otros emisarios eran levitas que servían en el templo como sacerdotes o ayudantes encargados de los servicios básicos del templo.
Esta delegación estaba muy bien acreditada pues sus jurisdicciones provenían del Sanedrín, el máximo órgano de gobierno de Israel.
¿Por qué los judíos de Jerusalén enviaron sacerdotes y levitas a preguntarle a Juan quién era?
Los judíos enviaron emisarios ante Juan porque su ministerio estaba impactando, las multitudes salían para ser bautizadas por él (Mateo 3:5-6, Marcos 1:5, Lucas 3:8), tanta repercusión tuvo su ministerio que muchos años después cuando el apóstol Pablo fue a Éfeso encontró discípulos de Juan (Hch 18:25, 19:3). El pueblo judío esperaba un Mesías que pacificara la Tierra, aguardaban el reinado de la justicia, al héroe que les devolviera sus tiempos de gloria y esplendor, un príncipe de la dinastía de David o una figura sobrenatural directamente de Dios y necesitaban saber si ese era Juan.
¿Por qué le preguntaron a Juan el Bautista si era Elías?
Los judíos creían que, antes que viniera el Mesías, volvería a la Tierra Elías para ser Su mensajero y preparar al mundo para recibirle. La referencia en la venida de Elías antes que el Mesías la observamos en Malaquías 4:5. Juan negó esto aunque podemos leer en el evangelio según Lucas 1:15-17 que el ángel le dijo a su padre Zacarías que él vendría con el espíritu de Elías.
¿Por qué le preguntaron a Juan el Bautista si era el profeta prometido y esperado?
Había un profeta de la magnitud de Moisés que debía presentarse. Esta creencia se remontaba a la seguridad que Moisés le dio al pueblo en Deuteronomio 18:15: “Profeta de en medio de ti, de tus hermanos, como yo; te levantará Jehová tu Dios; a él oiréis.” Esperaban entonces los judíos que surgiera el Profeta más grande de todos y necesitaban saber si era Juan. Pero él rechazó esa idea.
¿Qué respondió Juan cuando los sacerdotes y levitas le preguntaron quién era? ¿Qué dice Juan de él mismo?
Cuando le preguntaron a Juan acerca de su persona negó ser Elías y el otro profeta, aunque el mismo Jesús dio a entender que él fue el cumplimiento de la profecía sobre la venida de Elías (Mateo 17:12.) Cuando sacerdotes y levitas preguntaron a Juan quién era él respondió que era una voz que llamaba al pueblo a preparar el camino para la venida del Señor. La cita es de Isaías 40:3 de esta forma se identifica con una profecía. Los cuatro evangelios la citan (Marcos 1:3; Mateo 3:3; y Lucas 3:4). Juan fue honesto y rechazó los títulos que las personas estaban dándole.
¿Qué significado tiene la preparación
de los caminos?
Las carreteras del Oriente eran, en aquella época, caminos sin pavimentar. Cuando un rey tenía intención de visitar una provincia, o un conquistador quería recorrer sus dominios, las carreteras se aplanaban, enderezaban y acondicionaban para poder facilitar el tránsito por ellas. Lo que Juan estaba diciendo era que no importaba quién era él sino que lo necesario era escuchar su mensaje para que todos estuviesen preparados para recibir al Señor que viene.
¿Por qué los sacerdotes y levitas le preguntaron a Juan por qué bautizaba si no era el Cristo, ni Elías, ni el profeta?
Esta vez le preguntaron a Juan sobre su ministerio, si hubiera sido el Mesías, o Elías o el Profeta, habría sido normal. Ezequiel (36:25) había dicho: “Esparciré sobre vosotros agua limpia, y seréis limpiados de todas vuestras inmundicias; y de todos vuestros ídolos os limpiaré”. En Zacarías 13:1 leemos: “En aquel tiempo habrá un manantial abierto para la casa de David y para los habitantes de Jerusalén, para la purificación del pecado y de la inmundicia”. Es en correspondencia con estos textos que los judíos relacionaban la pureza ritual con el bautismo. Ellos esperaban que luego de una limpieza y un arrepentimiento en toda la nación vendría el Mesías; Sin embargo, Juan había negado que él fuera uno de ellos. Por otra parte el bautismo que se practicaba antes de Juan no era para los israelitas, sino para los gentiles que procedían de otros pueblos y religiones, se convertían a la fe de Israel y tenían que ser lavados. A un israelita no se le bautizaba nunca porque ellos ya eran del pueblo de Dios por ser descendiente de Abraham y haber sido circuncidado.
¿Qué respondió Juan cuando le preguntaron por qué bautizaba si no era el Cristo, ni Elías, ni el profeta?
“Juan les respondió diciendo: Yo bautizo con agua; mas en medio de vosotros está uno a quien vosotros no conocéis. Éste es el que viene después de mí, el que es antes de mí, del cual yo no soy digno de desatar la correa del calzado.” (Juan 1:26-27) Leemos que él contestó dos cosas la primera que bautizaba solo con agua a diferencia del bautismo qué haría Jesús (Juan 1:33) porque su bautismo era para preparar a las personas para la llegada del Mesías y la segunda que él estaba anticipando que el Mesías ya estaba entre ellos y no le conocían. Fue así que la investigación que se hacía sobre su persona se convirtió en un testimonio acerca de Jesús destacando la diferencia que había entre ellos.
Cada vez que Juan Bautista sale en escena concentra toda la atención de quienes le rodean en Jesús como aquel a quien todos deben dirigir la mirada con fe.
¿Qué significa la frase: no soy digno de desatar la correa de su calzado?
El ministerio de Juan era muy importante porque como resultado de él las personas tomaban conciencia de su situación y se arrepentían. Entonces cuando llegó Jesús ya muchos estaban listos para escuchar su mensaje y seguirlo. Juan estaba bien seguro de que él solo era el mensajero de un Rey que estaba por venir. Él era una persona humilde. Quitarle las sandalias al que llegaba a la casa era algo que hacían solo los esclavos y Juan decía que no era digno ni siquiera de hacer eso por el que vendría porque no esperaba nada para sí mismo sino que toda la atención se centrara en el Cristo al que anunciaba. Leamos el evangelio según Mateo 11:7-15 y regocijémonos porque Dios enaltece a sus hijos.
El pasaje culmina diciendo que esas cosas sucedieron en Betábara, al otro lado del Jordán. Mucho se ha tratado de investigar sobre este lugar pero su ubicación exacta se desconoce.
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